lunes, 24 de septiembre de 2012

Elegir muñecas sexuales


Las muñecas sexuales proporcionar una gran estimulación, ya que permiten tener las manos libres y realizar penetración en posiciones prácticamente idénticas a las que se realizan con una pareja. Están más cerca de la experiencia física de tener relaciones sexuales que los masturbadores de mano. El sexo con muñecas es algo que muchas personas están dispuestas a explorar

Eso sí, la gama de muñecas que se puede encontrar en el mercado puede ser algo confusa.
Es importante saber exactamente por dónde empezar si se quiere utilizar una muñeca, ya que la búsqueda sin tener ni idea puede ser algo frustrante. Es mejor hacer una investigación antes de comprar para evitar una compra decepcionante. 

El primer modelo que puedes encontrar es el de las denominadas Blow Up. Estas son las muñecas más básicas que a menudo no incorporan ningún tipo de masturbador.

Simplemente tienen orificios lisos incorporados en el diseño. Las puedes utilizar “tal cual” una vez que les has dado una buena dosis de lubricante sexual. Estas muñecas sexuales de nivel básico son una gran manera de experimentar una sensación más realista, sin tener que preocuparse por el almacenamiento. Una vez que hayas terminado, simplemente se debe desinflar y se vuelve a poner en la caja.

Luego encontramos las Realistic Blow Up. Encontramos en ellas túneles de fricción, que a menudo están equipados con genitales integrados o desmontables. Suele venir un vibrador incluido para intensificar las sensaciones y algunas incluso hablan, chupan o lamen. También vienen con algunos extras, tales como una bomba de aire para inflar, una bolsa de almacenamiento, etc.


Los excitantes piercings de los pezones


La perforación del cuerpo ha existido desde tiempos antiguos. Algunos dicen que los centuriones romanos se traspasaban los pezones como un símbolo de honor y fraternidad. 
También se sabe que los antiguos romanos utilizaron la perforación del prepucio (que se practicaba a los esclavos como medio de control sexual). Sabemos que las mujeres de mediados del siglo XIV tenían un gran interés en mostrar sus pezones de esta manera.
La perforación siempre se ha realizado con una aguja, pero en las últimas décadas este proceso se ha mejorado de forma espectacular. La ciencia médica moderna ha reducido en gran medida las complicaciones, y con la ayuda de un profesional, pocas cosas pueden salir mal. A pesar de que los rockeros británicos punkis popularizaron el método DIY (do it yourself), esta no es para nada una opción recomendable.

Los piercings en los pezones deben ser realizados por profesionales que cuentan con el equipo y el ambiente estéril adecuado, además de la experiencia de cientos o miles de repeticiones. El procedimiento básico es sencillo. La entrada y la ubicación de la salida se marcan con un bolígrafo. A continuación, toda la zona se esteriliza con un antiséptico y se congela, ya sea con un anestésico local o con otro método.
Después se realiza el agujero mediante un tubo delgado y puntiagudo llamado cánula, seguido inmediatamente por detrás de la primera pieza de joyería que se va a colocar en el pezón. Todo esto se puede hacer sin dolor excesivo, pero teniendo en cuenta la sensibilidad de los pezones, puede que tengas posteriores molestias. Los que ya tienen uno dicen que las molestias posteriores merecen la pena.




Los juguetes sexuales más antiguos


Los juguetes sexuales y otros dispositivos eróticos han existido a lo largo de la historia del ser humano.

La evolución de colores, tamaños, materiales, etc. de lo que nuestros antepasados utilizaban para mejorar sus experiencias sexuales nos permite hoy en día disponer de una inmensa variedad y diversidad de objetos sexuales.

Existen una serie de juguetes sexuales antiguos que han jugado un papel particularmente significativo en el tiempo. Toma nota:

- El más viejo del mundo
El juguete más antiguo jamás descubierto tenía otros usos más allá que solo el del sexo. Descubierto en una cueva en Alemania, los fragmentos fueron integrados de nuevo y se estudiaron en la Universidad de Tubinga. Se remonta a unos 30.000 años y el falo era utilizado hasta para golpear piedras para encender el fuego.

- El olisbos: un antiguo Dildo
En lugar de considerar la auto-satisfacción como un vicio, los antiguos griegos veían la masturbación como una válvula de escape para el estrés o el exceso de deseo sexual. Existen un montón de referencias literarias para apoyar su uso por parte de los hombres y, en menor medida, por las mujeres. Por otra parte, el olisbos fue también conocido por ser utilizado por las mujeres lesbianas que los griegos denominaban “tribads”.

- Las campanas de Birmania / Bolas chinas
Aunque los chinos no fueron los primeros en usar afrodisíacos, sin duda eran bien conocidos por su búsqueda amplia y científica de todo aquello que podía ser altamente estimulante. Conocidas también por la variación japonesas rin-no-tama, el uso de las ” Burmese Bells” en China se ha documentado ya en la dinastía Ming. Se cree que los hombres llevaban racimos de pequeñas bolas que tintineaban como cascabeles, en la zona del pene.

Conoce la Vaginoplastia


La vaginoplastia es un procedimiento médico que sirve para “endurecer” los músculos vaginales, que pueden verse flácidos con el envejecimiento y/o tras el parto.

Muchas mujeres eligen someterse a la vaginoplastia o a otras cirugías rejuvenecedoras para mejorar su respuesta sexual, aumentar la sensibilidad, aumentar los orgasmos, o para mejorar la estética de los genitales.
Es importante saber que la vaginoplastia y otras cirugías electivas son procedimientos algo controvertidos.

Conocer este tipo de procedimientos es importante para reconocer que las mujeres tienen derecho a embellecer las partes de su cuerpo que quieran, incluyendo sus genitales. Lo que hace que los genitales sean diferentes a otras partes del cuerpo es que normalmente no son expuestos en público. Esto puede llevar a pensar tanto a hombres como a mujeres que sus genitales no necesitan ser corregidos o cambiados.

Ver películas porno puede hacer que una persona se de cuenta de que sus genitales son algo diferentes. Tampoco hay que llevarlo al extremo y hay que recordar que hay una gran variación en la forma de los genitales femeninos y masculinos en todos los sentidos: tamaño, color… Estas variaciones son naturales y normales siempre que no obstaculicen los procesos básicos de la actividad biológica, fisiológica, o sexual.

La cirugía reconstructiva sirve para mejorar la función de una parte del cuerpo, mientras que la cirugía cosmética cambia la estética de un cuerpo para parecer más “normal”.
Originalmente muchas vaginoplastias se realizaban simplemente con propósitos reconstructivos, como por ejemplo la fijación de un defecto de nacimiento en una mujer. En las cirugías para corregir la agenesia vaginal, en el que la vagina está mal formada, la vaginoplastia se utiliza para permitir a la niña a menstruar, orinar y tener relaciones sexuales.


viernes, 21 de septiembre de 2012

Relaciones sexuales durante la menstruación


Cada vez son más las parejas que se animan a mantener relaciones sexuales también durante la menstruación, y es que en estos días la mujer tiene una mayor sensación en la zona pélvica y en la zona genital, lo que favorece a su excitación, además de que practicar sexo cuando una mujer está menstruando ayuda a aliviar los síntomas.

Hasta hace bien poco, la menstruación ha sido un tema muy sensible para miles de mujeres, algunas creían que no debían cortarse el pelo durante estos días del mes o que había que guardar reposo y no practicar ni sexo ni ningún deporte. Pero ahora estos mitos han dejado de creerse, y las jóvenes se preguntan si es bueno practicar sexo durante la menstruación.

La respuesta es sí, como te hemos dicho anteriormente, la regla ayuda a la excitación de la mujer. Pero durante estos días se deben tomar las mismas precauciones que los demás días, es decir hay que protegerse de los embarazos no deseados y de las enfermedades de transmisión sexual, y para ello nada mejor que la utilización del preservativo.

La doctora Laura Berman afirma que es completamente seguro mantener relaciones sexuales durante la regla, siempre que utilice protección. Además afirma que los mitos sobre las relaciones sexuales y la menstruación se originaron en mayor medida en textos religiosos, y científicamente nunca se han podido demostrar.

Lo importante es hablarlo con la pareja, y si ambos están de acuerdo, solo tienen que mantener una higiene, para que la experiencia no resulte desagradable, para ello es aconsejable darse una ducha antes y después, y limpiar bien la zona, únicamente con agua. O bien pueden practicar sexo cuando se estén duchando, así la higiene será mayor.

Alimentos y bebidas que destruyen el deseo sexual


El cuerpo es como una máquina que funciona de maneras diversa a raiz de los estímulos que recibe, siendo alguno de los más influyentes los que tienen que ver con la alimentación.

Los alimentos puede cambiarlo todo por completo, influyen no solo en la energía que ofrecen al cuerpo y en el aumento de peso, sino además en el estado de ánimo e inclusive en el apetito sexual, por eso hay que tener en cuenta evitar ciertas comidas y bebidas que se encargan de destruir la líbido, y con eso la vida sexual de muchas parejas.

Uno de los principales enemigos del deseo son los alimentos grasos y de mala calidad, presentes sobre todo en la comida chatarra tales como las hamburguesas y los hot dogs, ya que si bien son los preferidos de la gran mayoría es valioso destacar que se producen con altas tasas de productos químicos que son capaces de crear un desequilibrio hormonal en el individuo que los consumen, por eso sobre todo hay que evitar comer carnes de mala calidad, o comidas compradas en puestos que nos hagan dudar de su higiene.

Los productos fritos como las papas, el pollo y otra gran cantidad de productos del mismo estilo también pueden resultar fatales ya que pueden contener grasas trans, las que al consumirlas alteran las tasas de azúcar en sangre por lo tanto provocan que la persona se sienta llena y adormilada, más para una noche de sueño que para una de acción, ya que sin energía es sumamente difícil ponerse en plan de conquista, o satisfacer los deseos sexuales de la pareja. Lo mejor es mantenerse liviano y lejos de los productos fritos.

Otro de los grandes enemigos de un buen desempeño sexual es otro de los preferidos de muchos: el alcohol. Contrario a lo que se pueda creer sobre el consumo de bebidas alcoholicas a la hora de intentar soltarse, despreocuparse y disfrutar de una buena noche de sexo, lo que ocurre es que este producto genera sueño y aletarga los canales receptores que son los necesarios para generar excitación. Lo que hay que evitar es beber en exceso y a diario, en lo posible hay que acompañar la bebida con agua para mantenerse hidratado a todo momento.

Los lácteos presentes en quesos, yogures, helado y otros preparados también pueden ser perjudiciales en exceso, ya que pueden constipar al individuo haciendo que se sienta hinchado e incómodo, y en las mujeres provoca un aumento en el nivel de dolor y malestar generado por la menstruación, por lo que los cólicos fuertes y la hinchazón estarán a la hora del día, por lo tanto es prácticamente imposible sentirse sexy de esa manera.

Los expertos en nutrición sabrán guiarlo en las cantidades que debe comer por semana.

8 frases que las mujeres odian escuchar después del sexo


Cerca de 4.000 personas participaron en una encuesta realizada por el sitio de Entremujeres, en la que se consultaba sobre cuáles eran las frases que odiaban escuchar después del sexo. La respuesta femenina es contundente.

A continuación te dejamos las respuestas más frecuentes.

1.- “Me tengo que ir”
Ésta es la frase que más rechazan las mujeres luego de una noche de pasión, pues según el sondeo, el 41% busca atención y que el hombre le comente cuánto disfrutó de la relación sexual y, más aún, que no salga corriendo.

2.- “¿Dónde está el control remoto?”
Después de una relación sexual las mujeres (por lo menos la mayoría) buscan caricias y regaloneos, por lo que ponerse a ver televisión u otra cosa provocarán el enojo de tu pareja. El 19% de las féminas que respondieron a la encuesta votó por esta opción.

3.- “No tengo ganas de hablar”
Bien sabido es que las mujeres odian la indiferencia y no ser escuchadas, es por esto que rechazarán completamente esta frase, pues consideran que hablar es la oportunidad para conocer intimidades y conocerse mejor. La mayoría valora el encuentro sexual y lo que viene después de él, por lo que el 16% de las participantes dice sentirse frustrada cuando escuchan esta frase.

4.- “No quiero compromisos”
Cuando has “intimado” con una persona con la que no tienes una relación pero te gusta y considerabas que el haber estado en la cama con él era el broche de oro, esta frase es como un balde de agua fría. El 12% dijo odiar estas tres palabras.

5.- “¿Me puedo quedar?”
Esta frase es todo lo contrario a la número 1. Si lo que buscas es sólo un affaire, odiarás cuando el hombre te pida pasar toda la noche contigo y por la mañana tomar desayuno juntos. Al 10% de las mujeres que respondieron la encuesta dijeron sentir terror de escuchar esta frase.

6.- “Cómo estuvo?
No falta el tipo egocéntrico que de lo único que quiere hablar después de la relación sexual es de “cómo estuvo en la cama”. Con esto sólo dejan entrever su inseguridad.

7.- “Estás más gordita”
Esta es una de las peores frases (o la peor) que podría decir un hombre, pues ataca la autoestima de su compañera. Puede que ella no diga nada, pero lo que sí es seguro es que no querrá volver compartir su cama con el mismo hombre.

8.- ¿Son naturales?
Es sabido que a los hombres no les gustan las mujeres “planas”, pero de ahí a preguntar si son naturales, es el colmo de la desubicación.

Gestos que delatan a una mujer insatisfecha en la cama

En muchas ocasiones las mujeres no quieren hacer sentir mal a su compañero de cama cuando una relación sexual no le ha dejado bien, pero hay gestos que las delatan, y hoy vamos a ver cuales son estos gestos.

Tanto hombres como mujeres vivimos intentando mantener en secreto nuestras emociones para no herir a los demás, pero hay gestos que expresan mucho más que las palabras, por ejemplo, nada más terminar la relación sexual salir huyendo de la cama

Es algo que hacen algunas mujeres, y también algunos hombres cuando la relación sexual ha sido un desastre.

Cuando una relación sexual es placentera tendemos a quedarnos un rato al lado de nuestra pareja. Mientras que cuando no estamos satisfechos salimos corriendo de la cama y es como decirle a la cara que el sexo ha sido un desastre.

Si es una relación esporádica o no viven en la misma casa, y ella o él te dice, mejor me voy a mi casa a pasar la noche o pone cualquier excusa para no dormir contigo, es algo evidente, no le ha gustado y no quiere repetir.

Y por último, si una mujer se encierra en el baño después del sexo y no hay manera de que salga, es probable que el sexo no le haya gustado.


sábado, 15 de septiembre de 2012

¿Por qué fingimos?

Entre la satisfacción actuada y el imperativo que obliga a satisfacer al otro.

En el mundo de las relaciones sexuales, hay un verbo que se impone: “satisfacer”.
Para ellos tiene implicancias de calado más hondo, ya que los obliga a “sostener” la escena sexual hasta que su partenaire da las señales de estar cabalmente satisfecha. Es decir: son puestos a prueba y su virilidad parece en constante examen. Por su parte, ellas tienen la ventaja de poder resultar siempre “perfectas” en eso de exhibirse plenas, en base a esas inconfundibles manifestaciones que no dejan dudas de “estar plenas”.

Esto, que la mayoría de los hombres vive como “certificado de una buena performance”, muchas veces no es lo que parece. ¿Por qué? Porque más del 50 por ciento de las mujeres alguna vez fingió un placer que no siempre puede sentir y que, en otros casos, no han conocido nunca. Lo más llamativo es que muchas, una vez que ensayan -¿el arte?- de fingir no lo abandonan.

El show debe continuar

“Finjo mi orgasmo porque sé que nunca lo voy a conseguir, y así, por lo menos, puedo hacer que mi pareja disfrute igual. La primera vez lo hice porque él lo esperaba y yo sabía que no me iba a pasar. La segunda, porque ya lo había hecho antes”, justifica Mariel, de 32 años.

Edith Martin, médica sexóloga, describe estos comportamientos como “la reproducción de un círculo vicioso. La mujer empieza a fingir para aparentar que ella (y él) son buenos amantes, y continúa haciéndolo para evitar que él se desilusione. Y se siente atrapada”. Hay, por debajo de esta puesta en escena, un gran desconocimiento del propio cuerpo y de la sensación orgásmica real. O dicho de otro modo: exceso de ansiedad, tensión, inseguridad.”

¿Por qué (no) me pasa?

“Una experiencia espiritual”, “el rugido del océano”, “la petit mort”. Tantos rótulos magnifican la experiencia del orgasmo que se hace difícil visualizarlo como lo que es: “un reflejo que depende del sistema nervioso e implica una sensación de placer junto con la contracción rítmica de los músculos pubococcígeos”, explica Martin. Para producir la respuesta orgásmica, se necesitan caricias adecuadas en el sitio preciso: el clítoris. Aunque abundan los mitos sobre el “orgasmo vaginal” o “combinado”, en realidad, sin clítoris no hay orgasmo.
Y lo cierto es que este órgano, por su ubicación y tamaño, necesita estímulos específicos. “La penetración es un elemento secundario para obtener placer sexual. Es inusual que las mujeres alcancen el clímax sólo a través de la fricción causada por la penetración”, dice Jonathan Margolis, autor de O-Historia íntima del orgasmo.

El placer de mentir

Hablando de fingir, es imposible no evocar la escena de “Cuando Harry conoció a Sally”, en la que Meg Ryan le demuestra a su amigo Harry cómo las mujeres actúan un orgasmo “épico”, en medio de un concurrido restaurante.

Al margen de la capacidad de cada hombre, de distinguir entre un clímax verdadero de uno falso, “no todas las mujeres anorgásmicas fingen. En el caso de las que lo hacen, enfrentan dos problemas: por un lado, la disfunción orgásmica; por el otro, la necesidad de fingir. Ahora, fingir ¿reporta algún beneficio?”. Para Martin, sí. Y según la tipología femenina, serían estos:

1) Las complacientes, que buscan lograr la satisfacción de su amante. No se hacen cargo de su propio deseo y toman la actividad sexual como una obligación. Están inmersas en “la idea cultural falsa que hace responsable al hombre de llevar a la mujer al orgasmo”, describe el psiquiatra y sexólogo Andrés Flichman, y fingen para que su compañero se quede tranquilo creyendo que cumplió con la obligación de darle placer a su mujer. “Estas mujeres experimentan poco o ningún placer: para ellas es un ‘deber’, y cuanto antes termine, mejor. Es decir, que el beneficio de fingir el orgasmo es acortar el tiempo de la obligación marital”, dice la sexóloga.

2) El grupo de las frustradas. O las “jubiladas del sexo”. Ellas fingen porque creen que nunca tendrán un orgasmo, como en el caso de Mariel. Según Martin, “disfrutan, sienten placer, pero son incapaces de relajarse. Luego, cansadas de que su pareja intente estimularlas de distintas formas, lo ‘actúan’ para que el varón se sienta bien y no generarle fantasmas sobre su virilidad que lo llevan a abandonarla”.

En la actualidad, no alcanzar el orgasmo es visto como un fracaso. Y el gran error es ‘patologizar’ la anorgasmia femenina. ”El orgasmo está muy sobrevalorado en la sociedad, hay una constante presión para llamar anorgásmica a la mujer que no puede alcanzarlo fácilmente, cuando en la realidad el orgasmo femenino no es algo simple de obtener para una gran mayoría”, completa Flichman.

Los perjuicios de la mentira

“A los varones les molesta mucho más la mentira que la falta de orgasmo en sí”, dice Elda Bartolucci, psicóloga y sexóloga. ¿Por qué? Porque la segunda es mucho más fácil de solucionar, con buena comunicación, cambiando de tácticas, hablando de lo que les gusta, probando una y otra vez. En cambio la primera puede ser indicadora de falta de sinceridad y, en consecuencia, de otras mentiras en la pareja.

Hombres vestidos de mujer: ¿fantasía o realidad?

Hay varones que se prueban corpiños, se maquillan, se disfrazan de personajes femeninos… ¿Es un juego o son homosexuales encubiertos? Qué hacer si los descubrimos en esa situación.

Es bastante frecuente encontrarnos con aquel familiar hombre (padre, tío, primo, cuñado, etc.) que en las fiestas le gusta vestirse de mujer. Y hasta determinados ritos culturales, como las “despedidas de soltero”, incorporan esta práctica de travestismo.

Usar indumentaria del sexo opuesto forma parte de muchas costumbres en diferentes culturas. También los cambios en las estructuras de género, sobre todo en las mujeres, han llevado a una ropa más unisex. A diferencia de otras, las fantasías de “ser de otro sexo” tienen la fuerza de la concreción (aunque sea por un momento).

Existen varias prácticas relacionadas con el tema:

* Transformismo o drag queen: no es una opción ligada a la orientación sexual ni tiene objetivos erótico- estimulante. Sus fines son artísticos. El actor se convierte en mujer en el escenario pero no usa su recurso expresivo en la cama. No se cuestiona la identidad de género. Se diferencia, así, de las personas transgénero, transexuales o intersexuales que tienen que adaptar su cuerpo (por medio de hormonas, intervenciones estéticas o cirugía de reasignación) para buscar coherencia entre el sexo psicológico y el sexo biológico.

* Crossdressing: es una práctica que lleva a varones heterosexuales a concretar sus fantasías. No está asociada al placer sexual, sino a liberar “el lado femenino”, una especie de gusto por usar sus prendas, accesorios, maquillaje y hasta nombres de mujer. En general se realiza en secreto por la vergüenza que produce, aunque cada vez más hombres confían a sus parejas sus preferencias. Hasta se acompañan mutuamente a comprar ropa, o frecuentan clubes especiales para crossdressing. En nuestro país todavía es muy poco conocido y marginal. Sin embargo, ya existen lugares donde los hombres pueden concurrir y hasta reciben asesoramiento en vestuario y maquillaje para “montarse” o producirse.

* Fetichismo transvestista: actualmente está considerado un trastorno sexual (se ubica dentro de las parafilias). Consiste en sujetos heterosexuales (generalmente hombres) que buscan alcanzar el máximo placer sexual vistiéndose con alguna prenda del sexo opuesto (ejemplo: lencería, medias, vestidos, etc.). La mayoría de estos varones están casados o en pareja. La particularidad es que tienen una conexión más fuerte e intensa con el objeto fetiche que con su mujer. Desean estar con ella, tener relaciones sexuales, pero el clímax lo alcanzan cuando usan o se frotan con el objeto femenino.

"Todo es posible en la cama"

La intimidad de una pareja puede incluir el intercambio de ropa, el juego de roles, y hasta el uso masculino de consoladores. Todo es posible en la cama. Si un varón se viste con ropa de mujer dentro del juego erótico y dicha práctica no es condición para tener sexo, no debería llamar la atención. No implica nada más ni nada menos que buscar nuevos recursos para disfrutar.

Considerar que ese hombre es un homosexual encubierto es un error. La homosexualidad es un deseo de amar y/o tener relaciones con alguien del mismo sexo y no implica usar indumentarias ni accesorios del sexo opuesto.

La influencia de los porros en el sexo

Los porros de marihuana son una droga psicoactiva ilegal muy popular, hasta el punto de que muchas gente se olvida de los efectos que puede tener en su vida diaria y sexual.

Para muchas personas, la marihuana tiene el efecto de elevar el estado de ánimo, la excitación y estimulación de la actividad sexual. Pero la verdad es que el sexo bajo la influencia de la marihuana no siempre se puede considerar precisamente como romántico.

Es difícil decir como afecta la droga a cada persona, pero sí que es verdad que la marihuana no mejora el estado de ánimo y reduce de la misma manera que lo hace el alcohol.

Algunos afirman que aumenta considerablemente el deseo sexual, sin embargo, otros experimentan el efecto contrario.

Algunas personas explican que con la marihuana se obtiene un mayor vínculo entre los dos miembros de la pareja, pero diferentes investigaciones científicas desacreditan dicha información.

La verdad es que la marihuana puede tener consecuencias muy negativas.

Uno de sus posibles efectos es que distorsione el sentido del tiempo, con la ilusión de que la excitación y el orgasmo son más prolongados. También muchas personas que fuman habitualmente marihuana tienen problemas de infertilidad: los hombres pueden tener menor recuento de espermatozoides y las mujeres pueden tener una ovulación anormal.

Incluso muchos estudios científicos han demostrado que esta droga inhibe la síntesis de testosterona en los hombres.

El sexo oral puede provocar cáncer de garganta

Según un estudio español, uno de cada cuatro de estos tumores es causado por el HPV, una infección de transmisión sexual.

El sexo oral puede generar cáncer de orofaringe. Así lo demostró un estudio español presentado en el Congreso Europeo de Radioterapia y Oncología.

La investigación fue realizada por los hospitales La Princesa, Puerta de Hierro, Ramón y Cajal y Doce de Octubre, a partir de muestras de 102 pacientes tratados entre los años 2000 y 2009.

“El cáncer de orofaringe y cavidad oral incluye labios, mejillas y paladar. También es llamado ´de garganta´. El sexo oral genera predisposición al cáncer si hay infección por Virus del Papiloma Humano (HPV)", confirma el doctor Antonio Lorusso, director médico de la Liga Argentina de Lucha Contra el Cáncer (LALCEC).

Según lo publicado en el diario El País, los investigadores españoles concluyeron que el 26,7% de los casos fueron causados por el HPV y el resto, el 73,3%, eran atribuidos al consumo excesivo de tabaco o alcohol.

El HPV se relaciona principalmente con los cánceres de cuello uterino y de ano, pero las investigaciones de los últimos cuatro años apuntan que, transmitido por vía sexual oral, también tiene incidencia con los tumores de orofaringe.

El médico explica que la vía más común de infección de HPV es a través de relaciones sexuales. Tanto hombres como mujeres están en riesgo de contagiarse: se transmite por contacto con las mucosas del tracto genital femenino o masculino.

“Aunque no haya contacto sexual puede haber transmisión del virus de HPV a través del contacto de piel a piel, sin una relación íntima. Puede permanecer durante un tiempo sin manifestaciones”, alerta el doctor.

Entonces, ¿habría que usar profilácticos al tener sexo oral? “El preservativo es eficaz para la prevención de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y puede disminuir, pero no evitar, las infecciones por HPV”, concluye.

martes, 11 de septiembre de 2012

Rocco Siffredi, el ‘semental italiano’

Ha protagonizado más de 1.300 películas durante veinticinco años.

A los 16 años, un desconocido Rocco Tano ganó un concurso de masturbación. En un lapso de seis horas, el joven Tano obtuvo nada más y nada menos que 11 eyaculaciones. Este singular hecho le hizo pensar que, quizás, era un superdotado del sexo.

No se equivocaba el tal Rocco, pues en poco tiempo se convertiría en el internacionalmente conocido Rocco Siffredi, también llamado ‘el semental italiano’.

Los 24 centímetros de su pene le valieron la gloria con tan solo veinte años de edad. Desde entonces hasta ahora, Siffredi ha participado en más de 1.300 películas porno y ganado más de 40 premios. Una industria, la del pornografía, que le ha dado grandes satisfacciones y que abandonó como actor en 2007. No obstante, sigue colaborando estrechamente como productor y director.

Rocco Siffredi afirma que la actividad que ha desarrollado durante cerca de 25 años no es realmente una profesión. Nadie en su sano juicio podría pasarse ocho horas al día haciendo el amor… Afirmaciones que no hacen sino aumentar el mito y evidenciar, al mismo tiempo, la gran ‘vocación’ que motivaba al actor. En 2006 llegó el turno de las memorias de este emperador romano del sexo: Yo Rocco. En ellas nos narraba su infancia, sus primeras experiencias sexuales y sus inicios en el porno.
Hasta el día de hoy, en el que se ha convertido en empresario y padre de familia. Y es que Siffredi tiene la suerte de haber conocido a tres generaciones de profesionales del porno, coincidiendo con tres grandes épocas. La primera, la de los ochenta.

Una era de experimentación e ingenuidad donde el público (muy limitado) se conformaba con poco y en la que la incipiente industria actuaba en los márgenes de la sociedad. Pero llegaron los años noventa, y con ellos la libertad, el crecimiento del negocio y el interés de los medios de comunicación.

Hoy en día, y siempre según Rocco Siffredi, el porno es más extreno, más competitivo y más artificial. Lo dice un hombre que afirma no haber utilizado nunca Viagra ni vasodilatadores.

Un profesional del sexo que se atrevió a mostrar su pene erecto en la Convención Anual de Pornografía, en Oslo, ante más de 38.000 personas, con tal de acallar los rumores que le acusaban de trucar sus películas para alargar el tamaño de su miembro.

El mito consiguió ser uno de los personajes más decisivos y populares de una industria muy limitada, convirtiendo su nombre en su propia marca, reclamo y garantía de éxito. Así lo evidencian los títulos de algunas de sus películas: Rocco vampiro (1994); Jenna loves Rocco (1996); Rocco, el maestro que las vuelve locas (2000); Rocco las deja mudas (2000)… Un sinfín de pelis porno que cruzan tres décadas, desde finales de los ochenta hasta entrado el año 2000.


El anillo vibrador de Durex

Un juguete sexual muy popular que a algunos se les queda corto

Desde que la marca Durex llevara a las farmacias y parafarmacias su conocido anillo vibrador, Durex Play Vibrations, este juguete sexual se ha puesto muy de moda.
Antes ya existía, lo podías encontrar en los sex shops sin problemas, pero el hecho de verlo expuesto en supermercados o grandes superficies lo ha convertido en un producto popular.

Y también un tanto polémico… Hay quien afirma que siente placer con él y hay quien dice que no es más que una tontería. Mucho se ha comentado en relación a su calidad-precio y a la poca duración de la batería. Si te estás preguntando si se trata de un producto que merece la pena, aquí te dejamos un compendio de pros y contras para que puedas valorar por tí mismo.

El anillo vibrador es un juguete sexual, como hemos dicho, destinado a proporcionar una estimulación extra. Tanto del hombre como de la mujer. Dicho anillo se coloca en la base del pene, intentando que se mantenga bien sujeto cuando éste está erecto. El aparato tiene un botón para poder encenderlo y apagarlo cuando se desee, pero debes saber que no es eterno y que la batería dura una media hora más o menos.
Además del anillo Durex, que es de usar y tirar y que cuesta 7 euros, tienes el Control Ring de la marca de preservativos Control. Cuesta unos 6 euros y, a diferencia del anterior, se le puede cambiar la pila de botón que lleva incorporada. Por lo que puedes guardarlo para otras ocasiones.

Existen bastantes modelos, más potentes y con más accesorios incluídos (como un consolador incorporado, por ejemplo) en los sex-shops. Los precios no son necesariamente más caros, tienes desde 4.90 hasta 15 euros por un anillo básico.
Dado que el anillo vibrador está diseñado para estimular, si quieres conseguir mejores resultados deberás elegir la intensidad de dicha vibración. Si te apetece una vibración suave, es mejor que elijas la gama de farmacia (Control, Durex). Para una mayor potencia, visita las tiendas especializadas.

Entre las ventajas del anillo está, como venimos repitiendo, una mayor estimulación del clítoris y de los labios externos de la mujer. Dependiendo de la posición, claro está.
El hombre también puede sentir placer ya que el anillo vibra en la base del pene, estimulando sus testículos.
Según dicen algunos, este juguete retardaría la eyaculación masculina, al estar agarrado alrededor del miembro. Es cierto que un juguete puede dar un toque distinto a las relaciones, un elemento más para poder divertirse… pero hay quien encuentra el ruido de la batería un tanto cansino, o que la intensidad de la vibración de manera continuada les entumece los genitales. Por otro lado, pagar 6-7 euros por 30 minutos, a algunos les resulta absurdo.

Como todo, depende de los gustos de cada uno. Pero desde aquí recomendamos que, para saber lo que no te gusta, lo pruebes primero.

“Vulva”, el nuevo perfume con aroma a genitales femeninos

El sentido del olfato puede ser estimulado, como cualquier otro sentido, a la hora de intentar una conquista, ya que las atracciones pueden fundamentarse en una gran cantidad de factores, siendo el perfume que usa “esa” persona, algo tan importante como la forma en la que luce, o las cosas que dice, por ejemplo.

A la hora de oler para despertar pasiones, una gran alternativa ha salido al mercado, una nueva fragancia que seguramente no ha de pasar inadvertida, se trata de “Vulva”, un perfume con olor a vagina.

Son las feromonas las que tienen gran participación en el proceso de conquista, especialmente las que desprenden los genitales, tanto los masculinos como los femeninos, por eso no es algo tan descabellado contar con ellas concentradas en una fragancia sumamente especial, que puede utilizarse como herramienta secreta, para poder poner “a tono” a la pareja, antes de mantener un encuentro íntimo, con la intención de conseguir que el acto sexual sea mucho más apasionado, algo que necesitan tanto las parejas recientes, como las que hace años que están juntos.

La especialista, Silvina Valente, miembro del Comité de Jóvenes de la Federación Latinoamericana de Sociedades de Sexología es quien ha salido a explicar que se trata de un producto sumamente positivo a la hora de mantener vivo el deseo, ya que el sentido del olfato conecta de forma directa con el cerebro, por lo tanto las feromonas que desprenden, de los genitales masculinos y femeninos, en este caso de la vulva:

“liberan los llamados terpenos y fenoles, que tienen un impacto en la respuesta sexual”.

El perfume ha sido nombrado como Vulva Original, y ha sido emitido por la compañía alemana Vivaeros.
Según sus creadores se trata de una fragancia que desencadena el deseo y la atracción entre los individuos, ya que ha sido especialmente desarrollada para eso.
Aunque se trata de un perfume con olor a vulva se trata de un producto unisex, por lo tanto puede ser usado tanto por hombres como por mujeres, lo único que debe hacerse es colocar unas pocas gotas en zonas claves del cuerpo por su emisión de calor, tales como detrás de las orejas, en el pecho y en la espalda, y con eso ya se incrementa el deseo y el placer sexual.

“Las feromonas tienen como finalidad inducir un cambio de comportamiento en el otro, mejorar la atracción y aumentar la predisposición a iniciar una relación sexual”.

Las mujeres y el porno: ¿Por qué no?

Dejando atrás la idea de que la pornografía es exclusivamente para los hombres, es momento de aceptar que tanto a ellos como a nosotras, las imágenes eróticas pueden provocarnos fuertes deseos sexuales.

Como con la moda, la música y tantas muchas otras cosas más, la variedad es amplia y hay algo para cada gusto particular.
Pero seamos sinceras, aún es un poco difícil, o incómodo, ir a comprar una revista erótica (además de que no hay muchas dirigidas para mujeres, a mi parecer), de la misma forma en que comprar condones puede valerte que la viejita que está en la farmacia haciendo cola atrás de ti levante la ceja en señal de descontento.

Aquí es donde entra en juego el internet. Con todo un mundo de posibilidades sexuales al alcance de nuestras manos, no es sorpresa que las últimas encuestas revelen que cada vez más mujeres consumen pornografía, aunque los varones nos sigan llevando la ventaja.

Incluso, numerosos estudios proponen que alrededor de un 42% de las mujeres es más sensible a la pornografía que los hombres. Esto quiere decir que las imágenes eróticas nos excitan tanto o más que a los hombres.

Casi el 97% de las mujeres modernas admite haber visto pornografía en su vida pero menos de la mitad, cerca de un 40%, acepta haberse excitado con ella.
Por otra parte, el 18% de las mujeres admite haberse excitado con material romántico no pornográfico (¡Hola, Twilight!)

Así como el varón ha podido desarrollar su potencial amatorio -gracias al derecho de las mujeres de expresar las formas de su deseo- y hoy se permite disfrutar del prólogo erótico amoroso y de ese modo desatarse de su formato genital, también las mujeres estamos pudiendo permitirnos develar nuestros prejuicios, jugar con nuestra imaginación y sumergirnos en el juego que propone la pornografía como recurso sexual.

Pero bueno, vale la pena conocer algunos datos curiosos sobre la pornografía y el internet:

  • El 70% de los consumidores de internet son hombres y un 30% mujeres
  • El horario en que más gente ve pornografía es entre las 9 de la mañana y las 5 de la tarde
  • El 12% de los sitios de Internet son pornográficos. O sea, alrededor de unos 25 millones de sitios
  • 28,258 personas están viendo pornografía en este segundo
  • Un 8% del total de los mails enviados a nivel mundial en un día son pornográficos
  • 1 de 4 búsquedas en Internet tiene que ver con sexo o pornografía
  • El día de la semana en que se consume más pornografía es el domingo

¿Qué opinas?

El complejo de Dafne o la angustia de penetración

Es el miedo de las jóvenes ante la sexualidad. Lo padecen mujeres que no saben o no pueden poner en palabras lo que les pasa.
Entonces, el cuerpo expresa lo que no pueden decir: se cierran cada vez más y toman una actitud evitativa.

Apolo, dios del sol y la música, fue maldecido por Eros después de burlarse de éste por jugar con un arco y flechas. Eros, enojado, tomó dos flechas: una de oro y otra de hierro. Con la flecha de oro disparó a la ninfa Dafne, provocando rechazo y desinterés; y, con la de oro disparó a Apolo, provocando amor y desesperación por Dafne. Cuanto más él la perseguía rogándole que se quedara con él, ella más huía. La chica huyó hacia las montañas para evitarlo, se encomendó al Dios del río Peneo, y fue en ese momento, casi alcanzada por Apolo, cuando todo su cuerpo comenzó una mágica transformación: su piel se recubrió de corteza, sus delicadas uñas se alargaron multiplicándose en hojas, sus cabellos formaron un denso ramaje, el rostro fue desapareciendo detrás de la corteza y su cuerpo se convirtió en tronco, quedando transformada en un árbol de laurel, con sus raíces hundidas en la tierra, rígida e inmóvil para siempre. Apolo abrazó al árbol y, como ya no podía tomarla como esposa, prometió amarla eternamente y declaró que ese árbol sería consagrado a su culto”.

Apolo y Dafne forman parte de un relato de la mitología griega. Este mito simboliza el complejo de Dafne, también llamado “angustia a la penetración”, y consiste en el miedo de algunas jóvenes hacia la sexualidad.
Por miedo, algunas mujeres evitan cualquier tipo de contacto sexual: puede pasar que no quieran estar de novias, que les cueste afrontar situaciones de desagrado, tienen dificultades para poner límites o no saben defenderse ante situaciones que no aceptan. Prefieren perjudicarse ellas mismas, aislándose, con tal de no enfrentar la situación de miedo.

Son mujeres que no saben o no pueden poner en palabras lo que les pasa y es ahí donde el cuerpo expresa lo que no pueden decir: se cierran cada vez más y toman una actitud evitativa hacia la sexualidad y penetración. Esto puede provocar un espasmo involuntario de músculos que rodean la entrada de la vagina, a tal punto que es imposible el acto sexual, lo que provoca a veces mucho dolor y puede que la mujer se sienta aterrorizada, humillada y frustrada por los intentos. Los repetidos fracasos pueden dar lugar a sentimientos de inadecuación, especialmente en mujeres jóvenes.
A fin de evitar una confrontación con sentimientos dolorosos, estas mujeres intentan evitar todo tipo de contacto sexual. Esta situación provoca ansiedad, tensión, rabia y sienten mucha persecución interna y externa, en donde encuentran que el único lugar de alivio es el alejamiento de la situación temida.

Rechazan a los hombres tomando una actitud de indiferencia, menosprecio y hostilidad.

¿Quiénes lo padecen?

Generalmente se da en mujeres jóvenes. Pero no es excluyente de mujeres de edad más avanzada.

¿Cuál es la causa?

Se da una multiplicidad de factores que pueden conducir a este tipo de complejo. Algunos pueden ser:

* Falta de una adecuada educación sexual.

* Educación religiosa muy estricta.

* Efectos psicológicos producto de un abuso o violación.

* Falta de conocimiento e información respecto del propio cuerpo y sexualidad.

* Creencias erróneas con respecto a la sexualidad.

* Crecer con padres que tienen actitudes de rigidez, represión, persecución, provocando sentimientos de culpabilidad respecto al sexo.

* Hostilidad y rechazo hacia la pareja.

¿Cómo puede revertirse?

* Tomar consciencia que tiene solución.

* Tener paciencia y valorar paso a paso los pequeños logros.

* Eliminar creencias erróneas respecto a la sexualidad.

* Aprender a poner límites a situaciones desagradables, en vez de que sea el cuerpo quien lo haga.

* Aprender a confrontar.

* Pedir lo que se necesita, en lugar de tomar una actitud evitativa.

* Por último, es importante tomar una actitud activa en la resolución del problema. No hay soluciones mágicas, se requiere de mucho compromiso y ganas de resolverlo.

¿Cómo puede colaborar la pareja?

Con paciencia y mucha tolerancia, sin apresurarse. Ir muy despacio a medida que vaya adquiriendo mayor confianza, brindándole seguridad de que no se hará nada que ella no quiera. Dar confianza y decirle que no va a ser abandonada por esta causa. Apuntar siempre a la comunicación. En síntesis, mostrar amor, comprensión, calidez y protección.

Por la licenciada Ofelia Salgueiro, integrante del equipo profesional del Instituto de Psicología Argentino (INEPA).

El pene: lo que siempre quisiste saber y nadie te contó

Mucho se ha dicho sobre el órgano sexual masculino. Para ellos, el tamaño y el “buen funcionamiento” es casi una obsesión. Nosotras le damos más importancia a otras cosas pero, como parte inevitable de la relación, no podemos ignorarlo.
La revista Men´s Health publicó, en su último número, una nota sobre el lado desconocido del rinconcito viril.

Sorprende a tu pareja. Además de hacerle todo eso que te sale tan bien y a él tanto le gusta, aprovecha la intimidad y, de manera sutil y sensual, revelale estos datos sobre sus partes íntimas.
Otra opción: hacé un test erótico para ver cuánto sabe sobre "su amigo". ¿Lo conocerá bien? Si no, jueguen a la profesora y al alumno y enseñale.

1- Fumar puede acortarles el pene casi un centímetro. La ecuación es simple: cuanto mejor circula la sangre, mejor es la erección. El cigarrillo, al calcificar los vasos sanguíneos, sofoca la capacidad eréctil y el resultado… ¡Queda a la vista! Una razón más para convencerlo de que deje de fumar.

2- ¿Sabías que el orgasmo masculino promedio dura 6 segundos y el nuestro 23? En teoría, lo justo sería que por cada orgasmo nuestro, ellos deberían tener 4. Uno de los pocos casos en donde no nos conviene pelear por la igualdad…

3- Para que no te asustes o te hagas demasiadas ilusiones, te avisamos: hay dos tipos de penes. Los primeros son los que “crecen” mucho cuando consiguen la erección. Los otros, son los que siempre parecen grandes pero, en el momento del sexo, se “alargan” menos y la diferencia entre ambos estados no es tan notoria.

4- En relación al punto anterior, según una encuesta realizada por Men´s Health, el 79% de los hombres posee el primer tipo de pene y el 21%, el otro.

5- En la actualidad, los médicos regeneran piel para injertar en pacientes quemados usando prepucios de chicos circuncidados. Un prepucio puede producir hasta 23,000 metros cuadrados.

6- La próstata agrandada puede causar tanto disfunción eréctil como eyaculación precoz. Si vez que esto le pasa a tu pareja, y no encuentran una causa aparente, recomiendale que se haga un chequeo. Además, ten en cuenta que, a partir de los 50 años, tiene que hacerse un control anual obligatorio. Es feo, lo sabemos, tal vez si lo acompañás se sienta mejor.

7- El prepucio circuncidado puede ser reconstruido. La piel móvil sobre el eje del pene es empujada hacia la punta y ubicada en su lugar con una cinta. Luego, para fijarla bien, los médicos aplican anillos de plástico u otros complementos. Puede llevar años, pero finalmente se consigue que no queden rastros de la circuncisión. ¿Es necesario tanto sufrimiento?

8- Se estima que sólo un hombre entre 400 es lo suficientemente flexible como para autopracticarse sexo oral. Lo que sí está muy claro es que todos ellos lo pusieron en práctica. ¿Lo harán mejor que nosotras?

9- Esto nos suena extraño: un grupo de investigadores alemanes afirma que la penetración promedio dura 2 minutos y 50 segundos. Sin embargo, parece que las mujeres lo percibimos de manera diferente y sentimos como si hubiera durado 5 minutos y 30 segundos. Mmmm….

10- Los hombres que nos parecen lindos tienen el esperma más fuerte. Un equipo español le mostró a un grupo de mujeres fotos de hombres tenían buen esperma, fotos de hombres con esperma normal y fotos de hombres con esperma de poca calidad. Sin conocer este dato, ellas debían escoger a los que, según su criterio, consideraban más buen mozos. En general, las mujeres eligieron a los mejores productores de semen más allá del aspecto físico. ¿Instinto de supervivencia?

De yapa: datos inútiles sobre el miembro masculino

* La especie con pene más antigua de la que se tiene conocimiento es un molusco llamado “Colymbosathon ecplecticos”. Esto, en griego significa “sorprendente nadador con pene grande”.

* El pene que más ha disfrutado podría ser el del Rey Fatefehi de Tonga. Cuenta la historia que el señor desfloró a unas 37.800 mujeres entre los años 1770 y 1784: esto es, aproximadamente siete vírgenes por día. ¿No será mucho?

* Ciertos excesos afectan la fertilidad masculina. Uno de ellos, la bici.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Vaginismo: el sexo, afuera

Cuando es imposible ser penetrada vaginalmente.

Es un trastorno que sufren muchas mujeres y que pocas parejas llevan a la consulta por pudor o desconocimiento. Las principales causas suelen ser de origen psicológico. Hay tratamientos muy efectivos.

El vaginismo es la aparición persistente o recurrente de espasmos involuntarios de la musculatura del tercio externo de la vagina frente a la introducción del pene, los dedos o el espéculo. Es la definición técnica de un problema que sufren muchas mujeres y que limita su vida sexual.

En "castellano": la vagina se cierra y obstruye cualquier penetración.

La disfunción sexual en parejas donde la mujer presenta vaginismo se denomina "matrimonio no consumado". Debe diferenciarse de la dispareunia, que es la presencia de dolor durante el coito, que puede desencadenar en un vaginismo secundario.

"No hay estadísticas respecto a la prevalencia de este trastorno porque, en general, la consulta es tardía o directamente nunca llega al oído de especialistas que traten el problema", explica la ginecóloga y sexóloga Sandra Magirena.

Estudios internacionales hablan de un 10% de las consultas (Master y Johnson), y arrojan que las cifras suelen ser más altas en pacientes posmenopáusicas y con cáncer de mama, según la especialista.

El síntoma principal del vaginismo es el dolor al momento de la penetración, la cual se vuelve imposible.

"El vaginismo puede ser primario (siempre lo tuvo), secundario (aparece, por ejemplo, después de una cirugía o parto), situacional (en relación a una relación particular) o asociado a otras disfunciones (sexuales o psicológicas)", explica Magirena.

La causa del vaginismo puede ser:

1) Orgánica: himen rígido, endometriosis, enfermedad inflamatoria pélvica, tumores pélvicos, estenosis vaginal, malformaciones.

2) Psicológica: respuesta fóbica, respuesta condicionada a fantasías sexuales, cultura e información, abuso sexual, temor al embarazo.

"Descartando las causas orgánicas, generalmente son mujeres que le temen a la sexualidad por diversas razones: por fantasías terroríficas, por miedo a ser dañadas o castigadas o despreciadas, por asco o por rechazo al acto sexual. Es probable que tengan miedo a tener hijos, miedo a su propio placer", dice Magirena.

¿Qué hay detrás de esos miedos? "En general, culpa, una culpa que suele provenir de conflictos viejos, probablemente de la infancia, o de una pobre educación sexual", dice.

El vaginismo en general llega tarde a la consulta ya que muchas mujeres sienten vergüenza de contarlo. "A su vez, como en muchos casos tienen buenos orgasmos, no se busca una solución", explica la ginecóloga.

"El motivo de consulta es en general por deseos de fertilidad o porque la pareja expone la disfunción. Es un problema que genera mucho sufrimiento en las mujeres y que durante mucho tiempo permaneció oculto. La educación sexual y el reposicionamiento del género femenino han favorecido y facilitado el accesos a la consulta de las mujeres que padecen este trastorno", dice Magirena.

Su tratamiento no es complejo, sobre todo cuando se consulta tempranamente, pero requiere de compromiso y confianza de la paciente con el equipo de trabajo. En general puede ser tratado por el ginecólogo y el sexólogo, y consiste en una serie de ejercicios de relajación perineal, con un reaprendizaje de la función de la musculatura pelviana y una toma de conciencia de la zona.

"Esto puede facilitarse con el uso de dilatadores vaginales que se utilizan progresivamente, acompañado de ejercicios de relajación y respiración", apunta Magirena, quien trabaja junto a la psicóloga y sexóloga Viviana Tobi en un Programa de Reeducación Perineal Psicosexual, desde una perspectiva interdisciplinaria.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Los chupetones en el sexo

Los chupetones son esos moratones que nos salen debajo de la piel como consecuencia de la succión, por parte de otra persona, en el cuello.

En unos días desaparece sin tener más

consecuencias.
Los chupetones son fruto de momentos de pasión, así que en principio simplemente deberíamos disfrutarlos. Diferente es cuando nuestra pareja tiene tendencia a chuparnos siempre el cuello.

Si te gusta hacer chupetones, un buen consejo es que no parezcas obsesionado con ello. Piensa que si se realiza de forma constante puede llegar a ser incómodo.

Lo mejor es que hablen del tema y que sepas con seguridad si le gusta que lo hagas o no.



Si luces un chupetón indiscreto en el cuello, y quieres disimularlo, para reducir la hinchazón puedes aplicar sobre el chupetón una compresa fría o un poco de hielo envuelto en un trapo. De esta manera, podrás aliviar la rotura de los vasos sanguíneos rotos.





Para obtener mejores resultados hay que hacerlo inmediatamente después de que se haya producido.


Si esperas demasiado tiempo lo que puedes hacer es disimularlo con un poco demaquillajeo tapándote elcuello con un pañuelo. La pasta de dientes es otro truco para evitar que se hinche más.

De todos modos, debes tener en cuenta que los chupetones no son exclusivos del cuello.
Se pueden hacer en otras partes del cuerpo y pueden resultar mucho más excitantes. Puedes probar en zonas como los pezones, los lóbulos de las orejas, etc.

Sexo sin penetración

Es una forma agradable de disfrutar el placer sexual.
Muchas personas viven con la idea de que toda relación debe acabar con la penetración del pene en la vagina, sin embargo, el final del acto sexual con la penetración no es sinónimo de orgasmo.

Los caminos que lleven a la práctica del sexo sin penetración son muchos y cada uno de ellos tiene sus motivos que han de ser respetados.

Las razones varían en cada caso, por ejemplo: Cuando por motivos de salud (embarazos de alto riesgo, cirugías) se debe abstener del sexo, no es justo que también se deba privar del placer sexual a la misma persona o a su pareja sabiendo que para alcanzar este no es necesario la entrada del pene en la vagina.

Existen muchas formas de brindar y recibir placer, las rutas hacia el orgasmo son variadas! Los juegos, la masturbación, las palabras, las caricias, los besos son solo algunas maneras de vivir una experiencia sexual gratificante.

El sexo sin penetración es la mejor forma de vivir la sexualidad cuando por algún motivo, el acto sexual se ve interferido

ASÍ, ESTA FORMA DE AMAR ES ESPECIALMENTE IMPORTANTE PARA:

  • Mujeres que aún desean conservar su virginidad o cuando por sus razones no desea ser penetrada.
  • Cuando la penetración resulta dolorosa.
  • Mujeres con embarazos de alto riesgo.
  • Personas con cirugías recientes donde se ha recomendado la abstinencia sexual durante el tiempo de recuperación.
  • Cuando el alcanzar el orgasmo es mas fácil por otra vía que por la penetración.
  • Cuando hay ETS de por medio y aun con el uso del condón la pareja no se siente segura.
Para algunas personas, tener sexo sin penetración equivale a no tener penetración vaginal. Para otras personas equivale a no tener ningún tipo de penetración: ni oral, ni anal, tampoco vaginal.

Algunas personas también creen que toda relación sexual que implique cualquier tipo de penetración es demasiado riesgosa para ser llamada -sexo seguro-. Sin embargo, muchas personas eligen tener sexo oral y anal a veces para evitar embarazos o -preservar la virginidad- y por ese motivo incluimos esas prácticas aquí.

Ventajas
  • No tienen efectos secundarios para la salud.
  • El sexo sin penetración puede considerarse sexo seguro si no hay intercambio de semen y fluidos vaginales.
  • Ayudar a incrementar la confianza y la intimidad en la pareja.
  • Hace que el juego previo al acto sexual dure más.
  • Pueden ayudar a algunas mujeres a tener orgasmos más placenteros que los que podrían tener durante las relaciones sexuales con penetración.
  • El sexo sin penetración es una solución cuando no se dispone de otro método anticonceptivo.
  • Mejora el conocimiento del cuerpo de si mismo (a) y de la pareja.
  • El sexo sin penetración es eficaz para prevenir infecciones de transmisión sexual: Las relaciones sexuales sin penetración reducen en gran medida el riesgo de contraer VIH/SIDA y muchas otras infecciones de transmisión sexual a menos que se intercambien fluidos corporales mediante penetración oral o anal. Algunas infecciones, como el herpes y el VPH, pueden transmitirse por el contacto de la piel. Para reducir el riesgo de contagio en cualquier clase de penetración se puede utilizar el condón.
  • El sexo sin penetración es eficaz además para prevenir embarazos.
No siempre la penetración logra alcanzar el climax de la pareja
Posibles complicaciones
  • Es posible que el sexo sin penetración lleven inconscientemente a la penetración sin que la pareja esté lista para protegerse contra el embarazo o ETS.
  • Para algunas personas les puede resultar difícil abstenerse de la penetración.
  • El sexo sin penetración tiene riesgo de embarazo si el esperma entra en contacto con la vagina cuando el hombre eyacula cerca de la entrada a esta.
Manos a la obra… !!
Hay muchas formas de tener sexo sin penetración, revisa estas ideas que te presentamos a continuación:
  • Besos: Muchas personas experimentan y disfrutan con las distintas formas de besarse. Recuerda que tienes el cuerpo completo de su pareja para besar, aprovecha para buscar las zonas que a tu pareja mas le excitan y para estimular aquellas que ya conoces.
  • Masturbación: Muchas personas disfrutan de la masturbación. Es la forma más común de practicar la sexualidad. Es posible masturbarse en pareja. Además, pueden abrazarse o besarse mientras lo hacen. También se pueden observar al masturbarse, lo cual puede ser excitante y una buena manera de aprender lo que le gusta a su pareja.
  • Masajes eróticos: Muchas parejas gustan de masajearse el uno al otro. Para esto, se tocan y acarician los órganos sexuales. Pueden usar las manos, el cuerpo o la boca. Se pueden turnar ayudándose mutuamente para alcanzar el orgasmo. Utiliza los aceites, cremas o lociones para aumentar el placer.
  • Fricción de cuerpos: Muchas parejas frotan sus cuerpos uno contra otro, especialmente los órganos sexuales, para obtener placer y alcanzar el orgasmo.
  • Fantasías: Las parejas pueden leer narraciones eróticas o ver películas excitantes mientras están juntas. También puede ser muy excitante compartir fantasías sexuales. También es divertido realizar las fantasías de cada uno.
  • Juguetes sexuales: Entre estos se incluyen los vibradores y consoladores. Se pueden usar para explorar y acariciar el cuerpo. Se pueden poner condones en los juguetes que se introducen en la vagina o el ano. Si los integrantes de la pareja comparten el mismo juguete es necesario usar un condón para cada quien y también uno diferente para cada parte del cuerpo.
  • Sexo oral: A muchas personas les gusta usar la boca para estimular los órganos sexuales de su pareja. El sexo oral practicado en la mujer se llama cunnilingus. En el hombre, se llama fellatio. No puede causar embarazos pero si ETS. Para reducir el riesgo de contagio se pueden utilizar barreras. Por ejemplo, en el caso de la mujer se pueden usar condones rotos, protectores Glyde, protectores dentales y barreras de plástico. En el caso de los hombres, los condones son una buena barrera. Muchas personas para practicar sexo oral utilizan condones saborizados o no lubricadas.
  • Juegos sexuales anales: Muchas personas disfrutan de los juegos sexuales anales. Las parejas pueden explorarse los glúteos, el ano o el recto con la mano, boca, órgano sexual o con juguetes. El sexo anal no puede causar embarazos, pero puede fácilmente transmitir infecciones. Para reducir el riesgo de contagio se pueden utilizar el condón. Para mayor comodidad se pueden utilizar lubricantes.
Consejos
Es importante hablar con la pareja si se desea abstenerse de la penetración ya que esta decisión puede ser tomada de forma ofensiva para la otra persona.
Abordar el tema del sexo sin penetración podría resultar difícil. A continuación te damos algunas sugerencias para hablar de las relaciones sexuales sin penetración:
  • Piensa qué tipos de juegos sexuales le gustaría probar y cuáles no.
  • Imagina una conversación con su pareja. ¿Qué le gustaría decir a usted? ¿Qué cosas cree que podría decir su pareja?
  • Intente hablar de este tema con su pareja antes de encontrarse en una situación erótica.
  • Elija un momento en que tengan el tiempo y la intimidad necesarios para tener esta conversación.
  • Es mejor hablar claramente acerca de los límites que quiere establecer. Recuerde que su pareja no puede leer su pensamiento.Es importante expresar sus deseos y sentimientos. Y también es importante que escuche a su pareja.
  • Si se siente nervios o vergüenza, dígaselo a su pareja. Es posible que su pareja se sienta del mismo modo.
  • Pregúntele a su pareja qué piensa de las relaciones sexuales sin penetración.
  • Establezcan límites con los cuales ambos estén de acuerdo.
  • No dejen de hablar sobre los límites sexuales que se han impuesto.
¿Qué límites los hacen sentir bien?